lunes, 18 de junio de 2007

Anécdota, por Ezequiel Vaca

Un fin de semana, hace cuatro años, más o menos, estábamos en una plaza con mis amigos. Habíamos hecho una fogata; estábamos hablando, cuando pasó una señora que decían que era bruja. Se paró delante de nosotros, tiró algo al fuego y se fue; empezó a salir un olor como a muerto. Nos asustamos. No sabíamos que hacer, si irnos o quedarnos; nos quedamos, nos agarramos de la mano y empezamos a rezar un padre nuestro. Cuando estábamos en eso uno de los pibes dijo "yo no sé esa canción", nos empezamos a reir y le dijimos que no era una canción, que era algo que se decía para hablar con Dios.

Ezequiel Vaca